jueves, octubre 22, 2009


Mañana voy a ver a Charly. Nos han invitado, a mi mujer y a mí, nuestros sobrinitos veinteañeros, Andrés y Rocío. Reconozco que no estoy en forma porque hace tiempo (hace bocha) que no concurro a un concierto de rock. Pero soy un veterano de esas lides al punto que mi bautismo recitalístico fue en el año 70 del siglo pasado en ocasión del evento beat conocido como Barrock, autodenominado “Festival de Música Progresiva de Buenos Aires”, que se realizó en el velódromo municipal a imagen y semejanza del fundacional Woodstock celebrado en EEUU el año anterior. Estamos platicando de la prehistoria cuando apenas se había retirado el hombre de Neanderthal. Cuarenta años atrás. Uy Dios. Los hippies argentinos, gracias a Woodstock, aprendimos de los yonis a entonar el o-o-o-o-o que se puede escuchar en el disco triple del festival imperialista, en la parte que precede a la interpretación de la canción Soul Sacrifice por parte de la agrupación Santana. No sé si los pebetes de ahora continúan haciendo ese corito. Mañana me enteraré pero se me importa un ardite. En nuestro Woodstock subdesarrollado llegamos a tener un grupo criollo de nombre Zandunga (más tarde Katunga), que imitaba a Santana y sacaba Soul Sacrifice bastante gauchita. Asimismo había un señor llamado Héctor Starc que tocaba la guitarra, no digo como Hendrix, pero lo hacía endiabladamente bien. Endiabladamente es un término muy usado en las traducciones de novelas norteamericanas al castellano. Un par de años después presencié uno de los primeros conciertos de Charly cuando integraba un dúo llamado Sui Generis, juntamente con Nito Mestre. Ahora, para ver al recauchutado García 37 años después, es muy posible que:
a) me cueste subir las escalinatas del estadio de Vélez debido a mi avanzado reumatismo y a mi innato asma,
b) me voltee el agradable aroma de los porros Zaffaroni,
c) suponga un verdadero triunfo poder levantar mi cuerpo maltrecho de la butaca para hacer la estúpida ola, si es que aún la hacen -que con Paul Mc Cartney la hacían-.
Pero sé que valdrá la pena aunque me doy cuenta de que es larga la carretera cuando uno mira atrás,vas cruzando las fronteras sin darte cuenta quizás y, lo que es peor, churuchú rurururururu chururá.

9 Comments:

Anonymous gerjofe said...

No se haga demasiado problema, la van a pasar MUY BIEN con el Charly y su alrededor. Mándele un Feliz Cumple y !disfrute del "COLON"! (energía descontada).

1:13 p. m.  
Blogger estejulioesuno said...

Juega Velez con Colón?

4:53 p. m.  
Blogger Luigi said...

=)

Mi vieja tenía un disco de Katunga!!!!

(y me lo hizo escuchar toneladas de veces! también escuchaba a Perales! y a Richard Claydermannnnnnnnnnn! Este... la vida es jodida)

5:24 p. m.  
Blogger bonito lunch said...

te compadezco ir a ver a charly.

5:50 p. m.  
Blogger estejulioesuno said...

Claro, Luigi, pero eso era cuando se volvieron comerciales. Antes, cuando eran Zandunga y en los primeros tiempos de Katunga tocaban bien e imitaban a Santana. Mucho antes del sube sube sube y baja...

6:43 p. m.  
Blogger edu, desde el barrio, said...

MIRE UD...YO CREÍA QUE CHARLY SE HABÍA MUERTO DESPUES DE CLICKS MODERNOS.
SI ES EL MISMO QUE YO RECUERDO, AVÍSEME.

8:39 p. m.  
Blogger estejulioesuno said...

creo que el changuito cañero lo puso en formol

11:32 p. m.  
Blogger Unknown said...

"Endiabladamente" opera como traducción de la frase "the hell of".

Lo puntualizo porque del Sr. García no vale la pena un comentario.

Fernijul

8:24 p. m.  
Blogger estejulioesuno said...

En un libro de Mailer leí "fornicador de madres" por mother fucker.
¡Fernijul! que alegría vos por aquí, vení, tomémonos unos champagnats.
Y para hablar de Charly primero mucho odol con riotol.

9:38 a. m.  

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