REPORTE DESDE MONTEVIDEO

Entrar al Uruguay con este asunto de los ambientalistas de Entre Ríos me hizo acordar a la película de David Lean El puente sobre el río Kwai. Teníamos que atravesar el puente internacional, no antes de que lo bombardeasen, como en el extraordinario filme ganador del Oscar en 1957, sino antes de que los ecologistas de Gualeguaychú lo obturasen. Dejé a mi botija y a su bonita novia en el cerro y nos fuimos con mi esposa a caminar por Montevideo. Llegamos a la esquina de Durazno y Convención, inmortalizada por Jaime Roos en la canción Durazno y Convención. Es una esquina como cualquiera, la foto no me deja mentir. San Juan y Boedo antiguo también es una esquina cualquiera. Sin embargo, si la incluís en una bella canción, como es Sur, de H. Manzi y A, Troilo, la esquina se hace famosa aunque no tenga nada destacable. Hay muchas canciones con nombres de calles y avenidas. Avenida Rivadavia de Manal, por ejemplo, Esquina Libertad, de Los Piojos, que alude al lugar donde ensayaba la banda en sus tiempos primigenios (ojo, primigenios no tiene nada que ver con genios, y menos tratándose de esta agrupación), en la calle Aviador Palazzo, esquina Libertad, de Ciudad Jardín - Lomas del Palomar, pintoresco poblado del oeste de la provincia. El propio Jaime Roos tienen otra canción llamada Calle Yacaré, que está a metros del lugar donde fuimos con Mariana a beber grapa con limón, un centenario boliche al lado del mercado del puerto, que se llama El perro que fuma. Se dice que lleva su nombre por un marino inglés que fumaba en pipa y que solía concurrir al boliche en compañía de su perro que también fumaba. Tengo mis dudas.

Después fuimos a comer al Mercado del Puerto, al que también el gran Jaime le dedicó una canción. Comimos pamplonas al roquefort y nos regamos internamente con cerveza Pilsen.

Todo esto parece literatura de postal, así que les mando un beso, cuídense y avísenle a mi jefe que no sé cuándo vuelvo.